Masa madre para principiantes

La masa madre es una lección gastronómica que aprendemos bien tarde y es tan importante para la elaboración del pan o la masa de una empanada que es una pena que no la tengas a mano ya.

Todos hicimos nuestros pinitos en el confinamiento creyendo que dar con un buen pan en casa era sencillo, pero muchos se olvidaron de que no hay buen pan si no se tiene a mano una buena masa madre. Con la masa madre obtenemos un pan mucho más aromático y sabroso, con mejor textura y conservación.

Contenido

¿Qué es la masa madre?

¿Te estarás preguntando que es la masa madre? La masa madre o como también la llaman prefermento se utiliza en la panadería para potenciar las cualidades organolépticas del pan.

¿Sabías que gracias a la masa madre el pan es más saludable? Gracias a su fermentación larga, mejora el perfil nutricional del pan y sobre todo su digestibilidad.
¿Sabías que La masa madre se puede elaborar con cualquier tipo de harina? Sí, con cualquiera porque las levaduras viven, principalmente, en la cáscara de los cereales. Pero recuerda las levaduras no están presentes en las harinas refinadas.

Masa madre

Hacia tiempo que quería acercaros esta receta para que siempre tengáis un as en la manga. Os traigo una receta para principiantes que nunca falla.

Ingredientes

Solo necesitaremos dos ingredientes para que se haga la magia

Agua
Harina

Añadimos de agua los mismos gramos que la harina.

Elaboración

El primer día metemos en un recipiente de cristal con tapa 25 gramos de harina y de agua, removemos bien y cerramos.

Al siguiente día hacemos lo mismo añadimos de los dos ingredientes 25 gramos removemos, cerramos y dejamos hasta el día siguiente. Haremos esta misma operación durante 4 días.

Al quinto día cogeremos tres cucharadas del recipiente de masa madre y las meteremos en otro bote, a esto le llamaremos la prueba de que está bien. Añadimos al nuevo bote de masa madre, 3 cucharadas de harina y agua buscando una textura cremosa.

Removemos bien y con una goma marcamos donde está la masa. Toca esperar, dejamos reposar dos/tres horas para comprobar si nuestra masa madre está viva.

Cerramos el bote y cruzamos dedos, es broma no suele fallar. Pasado el tiempo comprobarás como tu masa madre se ha duplicado, ya está lista para utilizarse.

Una vez bien activa la masa, se guarda en un recipiente con tapa en la nevera. Cuando se quiera usar, sacar de la nevera, añadir harina y agua, esperar a que duplique su volumen. En ese momento usamos una parte de la masa y la otra se guarda otra vez en la nevera. Y así usamos la masa madre las veces que nos haga falta.