alas de pollo guisadas

Patas de pollo

Su origen culinario

Tradicionalmente en España siempre se comieron tanto las patas de pollo como las de gallina. Elaborarlas no requería grandes problemas y era bien sencillo si del cerdo se comen hasta los andares de los pollos hasta las patas. Lo primero que se hacia para poder añadirlas a un plato era limpiarlas, para limpiarlas se «churrascaban» en fuego, así se quitaba la piel y las suciedades o impurezas que pudiesen tener, era un baño en fuego como se hacía con los pelos del cerdo. Una vez limpias o bien se guisaban en salsa con un sofrito de verduras, o se hacia un buen caldo en agua.

Las patas de pollo en la actualidad

A día de hoy su consumo ha ido decreciendo hasta el punto que son pocas casas las que mantienen esta tradición culinaria que tanta hambre sacó y tan beneficiosa era. Una de las razones es que aquellos tiempos de escasez ya por suerte no son iguales y porque al tener poco que comer se tendió más a las alitas, aunque bien es cierto que en muchas casas de toda España se siguen cocinando, sobre todos en Extremadura, Madrid, Murcia, Comunidad Valenciana, La Mancha, Castilla y León o Canarias.

En Galicia en otros tiempos en las casas más humildes dieron sabor a la sopa o al caldo, en China son una delicia tanto que ya dos empresas españolas se pelearon por el pastel alado…Lo que más me sorprende, es que las superiores, las alitas, se consumen sin problema y no le hacemos ascos.

patas de pollo cocinadas

En el Perú su consumo es habitual en sopas y guisos o a la parrilla.

Lo que está claro es que fuera de nuestro país las compran por toneladas y lo que en un lado es una delicia, en el otro le ponemos mala cara o prohibimos ¿Por qué? Pues porque por desgracia no renta y porque comemos más con los ojos que con la boca.

patas de pollo

Son muy beneficiosas

En Nuestra tierra, en Galicia en algunas zonas se echaban las patas del pollo al cocido después de hervirlas y rasparlas, aunque no tienen ningún tipo de carne si tienen una sustancia gelatinosa que aportaba al caldo untuosidad.

La cisteína

Desafortunadamente para todos no es lo normal su consumo, digo desafortunadamente porque las patitas de pollo son una gran fuente de cisteína, pero como que no nos importa ¿Qué es la cisteína? La cisteína es un importante aminoácido encargado de acabar con el moco de los pulmones, y que ayuda así a combatir enfermedades como gripes y resfriados, y fortaleciendo nuestro sistema respiratorio.

Anota, la cisteína es uno de los desintoxicantes naturales más importantes y poderosos del organismo ya que impide la oxidación de las proteínas.

Un remedio natural de las abuelas de muchas partes del mundo

Bendita cisteína y es que las abuelas eran sabias porque intuían que las patas eran buenas.

Medicina para los chinos

Según la medicina tradicional china, las patas de pollo son eficaces para combatir la arterioesclerosis y enfermedades del sistema circulatorio gracias a su alto contenido de calcio, mientras que gracias a su concentración de colágeno son muy beneficiosas para nuestra piel. Las patas de pollo contienen calcio, magnesio, fósforo, silicio, azufre y estos minerales son buenísimos para combatir la artritis y el dolor en las articulaciones.

alas de pollo guisadas

Dónde se consumen

Las patas de pollo se cocinan en;

México, China, Costa Rica, Jamaica, España, Sudáfrica, Perú, Trinidad y Tobago, y Filipinas. 

Recetas más famosas

También son el mejor aperitivo para los cuatro patas

¿Sabías que las patas de pollo son un gran complemento en la dieta de tu perro y también ayudan a su salud dental? Son un aperitivo no graso y crujiente.

Recomiendan una o dos patas al día para garantizar el aporte de glucosamina y sulfato de condroitina para un perro de 20 kg de peso corporal. Las patas se deben dar siempre crudas y sin las uñas.

Patas de pollo

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