Mermelada de pimientos asados

Cocinando con Elena

Os traigo una receta muy especial, mermelada de pimientos asados. No solo la tendrás para acompañar tus mañanas, cualquier aperitivo puede ser especialmente rico si la acompañas con ella.

Además de ser una forma estupenda de conservar unos buenos pimientos, es una forma original de mermelada que os va a encantar.

Mermelada de pimientos asados

Ingredientes

  • 2 kilos de pimientos asados
  • 1,200 de azúcar moreno
  • El zumo de 1 limón

En cuanto a las cantidades el peso de los pimientos deben ser pesados ya limpios y asados. El pimiento para este tipo de receta ha de ser el rojo porque es más dulce que los verdes o amarillos y tiene más carne, por eso los pimientos rojos son los mejores para asar.

Precalentamos el horno a 200ºC con calor arriba y abajo

Elaboración

Lo primero que debes saber que esta mermelada lleva un poco más de elaboración que otras mermeladas porque tenemos que asar los pimientos.

Asar los pimientos en el horno

Para ello los limpiaremos bien, deciros que algunos prefieren asarlos enteros, otros limpiar tallo y semillas y cortarlos a la mitad para asarlos, como tú prefieras. A continuación los llevaremos a la bandeja del horno y los regamos con aceite de oliva. Asegúrate que el aceite está bien distribuido por toda la superficie de los pimientos y así están listos para asar.

Toca meterlo en el horno en el medio a la misma temperatura de precalentado 200ºC con calor arriba y abajo y los dejaremos unos 20 minutos, aproximadamente, el tiempo depende del tamaño y grosor de los pimientos. Recuerda a mitad de cocción darles la vuelta a los pimientos para que se hagan bien por ambas partes.

Una vez asados les sacaremos la piel, no te preocupes es muy sencillo, os daré un truco. Si tu bandeja no tiene tapa, la puedes forrar con papel aluminio ¿Para qué? El calor hará que el pimiento sude y se desprenda fácilmente la piel. Se me olvidaba debes esperar como mínimo media hora, este tiempo hará la magia sudarán los pimientos por lo que la piel se irá soltando de la carne y se atemperarán así no nos quemaremos los dedos.

Mermelada

Una vez listos y bien limpios toca hacer la mermelada. Igual que cualquier otra mermelada, los pasamos a una tartera con el azúcar y el limón.

Ponemos los pimientos asados en una cacerola y le añadimos primero el zumo del limón, y a continuación el azúcar. Dejamos cocinar a fuego medio durante unos 15 minutos, remueve para que no se pegue, se hará muy pronto y no queremos que se pierda mucha agua o quedará demasiado espesa. Recuerda que una vez fría va a espesar más. Retiramos del fuego y dejaremos que atempere. Cuando se haya enfriado un poco, puedes batir para que la textura sea homogénea.

Una vez lista la mermelada la pondremos en un tarro de cristal esterilizado y cerramos bien. Dejaremos a temperatura ambiente hasta que se haya enfriado por completo. Después lo meteremos en la nevera.

Si tienes mucha cantidad haz el mismo proceso que utilizas para conservación de las mermeladas, así siempre la tendrás a mano.

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